 El libre comercio en el mundo está en juego y nadie es optimista frente a lo que podrá pasar entre las dos potencias más importantes del planeta.
Todo por cuenta de los aranceles que impuso el Gobierno del Presidente de los Estados Unidos a bienes importados de China, medida que entró en vigencia el Viernes 6 de Julio.
Ese día se aplicaron aranceles del 25% a productos de los sectores tecnológico e industrial del país asiático por valor de US$34.000 millones, pero resulta que el gobierno chino no se quedó atrás y en represalia hizo lo mismo con más de 500 productos estadounidenses por un valor similar, US$34.000 millones.
A juicio de analistas colombianos se puede decir que arrancó la ‘guerra’ comercial entre los dos colosos de la economía mundial y en consecuencia el impacto se sentirá con fuerza en el universo porque esas dos economías mueven el mundo.
Los primeros que percibirán ese impacto serán los consumidores de los Estados Unidos y de China y poco a poco se extenderá al resto del planeta porque otras economías, como la europea, también están empezando a aplicar aranceles para combatir las medidas del señor Donald Trump, presidente de EE.UU.
La pregunta que muchos se hacen es ¿por qué Trump decidió imponer aranceles? La respuesta es sencilla, dice Giovani Reyes, director de Posgrado de la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario.
“Lo hizo para proteger a los empresarios que producen en Estados Unidos y evitar la competencia y la competitividad mundial, pero lo que no tuvo en cuenta es que esa medida hará elevar los precios de los productos que van a pagar los consumidores de su país”.
Otro aspecto que no ve Trump o no quiere ver, agrega el académico, es que echa para atrás el libre comercio. “Volvemos al Siglo 16, el de la economía mercantilista, que en esencia es vender todo lo que se pueda sin comprar nada. y ese ‘juego’ - por llamarlo así- atranca todo porque para venderle a otros países, también tiene que comprarles. Me parece que la actitud de Trump no tiene sentido”.
Otros interrogantes son ¿qué pasará ahora? ¿Será que los gobiernos reversarán las medidas?
Julio César Alonso, director del Centro de Investigaciones en Economía y Finanzas, Cienfi, de la Universidad Icesi, no es muy optimista.
“Lastimosamente pareciese que estos acontecimientos no serán el final de la historia. Ahora ya es posible hablar de una ‘guerra’ comercial entre las dos economías más grandes del mundo. Y existe evidencia de otras economías como la Unión Europea que se empiezan a linear para combatir las medidas comerciales de los Estados Unidos. Infortunadamente esto tendrá efectos no solo en los negocios y consumidores de Estados Unidos y China sino también en todo el mundo”.
En una economía tan globalizada como la actual y con tantas interrelaciones, las tarifas de los aranceles afectarán cadenas logísticas de producción a nivel mundial y no habrá economía alguna que no se vea afectada.
Alonso añade que “es aún prematuro determinar si esta ‘guerra’ parará ahí o se escalará. Pero también parece claro que será difícil echar marcha atrás. Y por eso no es fácil ser optimista frente a este panorama”.
Por su parte, María Claudia Lacouture, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Colombia, opina que “una ‘guerra’ comercial sólo deja perdedores en diferentes niveles. Nadie gana. La aplicación de los aranceles entre China y Estados Unidos presionará el desarrollo del comercio internacional y constituye un retroceso a años de trabajo por el libre comercio en el que han participado todos los países para facilitar los negocios, tener reglas claras y de largo plazo para las empresas y el crecimiento de la economía”.
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